SATISFACCIÓN DEL CLIENTE

Si la satisfacción del cliente es una métrica que se ha calculado durante décadas en muchas organizaciones, varía mucho según la empresa o contact center.

Hay diferentes maneras de medirla, pero sea cual sea el método que apliquemos, podemos usar los resultados para controlar y resolver los puntos débiles mientras aprendemos, a conseguir clientes más felices.

Medir la satisfacción = Clientes más felices

Medir la satisfacción del cliente a lo largo del tiempo nos ayuda a saber cómo han recibido estos los cambios que hemos realizado en nuestro negocio.

Si cualquier empresa quiere sobrevivir, tiene que priorizar la satisfacción del cliente.

Con esto en mente, es una buena práctica comparar nuestro desempeño de satisfacción para evaluar cómo los clientes están respondiendo a nuestros cambios, pero también se pueden aplicar para establecer puntos o metas de referencia de satisfacción.

Por ejemplo, si tenemos una calificación general de satisfacción del 80%, podemos establecer un objetivo de alcanzar el 85% en un cierto período de tiempo. Siempre dentro de la lógica y conociendo nuestras capacidades.

Pero no solo hay que centrarse en los fallos que cometemos, hay que evaluar también lo que hemos hecho bien y por lo que el cliente ha respondido positivamente para repetir el éxito y crear clientes más felices.

Medir la satisfacción = Clientes más felices